lunes, 28 de octubre de 2013

invierno periférico

La lluvia ácida esta derritiendo los lagrimales llenándolos de goteras, 
el olor del aceite viejo, las sopaipillas y la vieja de la esquina,
también derrite los lagrimales llenándolos de goteras,
el pebre de hace 3 días con restos de mostaza,
llena de goteras al aparato digestivo,
aldehídos y alquibencenos de la lluvia ácida,
la casa llenan de pelelas, los gatos se sacuden,
y mi rostro esta lleno de goteras,
ya no hace frío porque el fogón que calienta al aceite,
calienta al nailon que cubre la espalda,
se derriten los paraguas y las caídas de hocico son mas resbalosas,
y los dientes que se caen se evaporan en las posas,
las nubes negras se confunden con el esmog y el humo de la micro,
el aceite viejo fríe mas rápido y va mejor, 
hay hambre, hace frío y las goteras son sólo goteras.

"De echo no tenía guata e pan, tenía guata e hambre, se devoró el peazo e allulla y dejo tirá la otra mitá, tal vé pa algún amigo canino, porke puta el orgullo de ser callejero no se pierde por una cotidiana búskeda, siempre hay ke tener el valor de pensar en los iguales de cagaos ke uno..."

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