En caricias imaginarias pienso que puedo tocarte y a veces
imagino que estamos siendo parte de aquello a lo que los humanos denominan: amor.
Estamos en tu pieza jugando a hacerlo- frenéticamente-, prendes y apagas la música, y en largos intervalos tomamos agua, respiramos, tanteamos el polvo y entonces encendemos luz.
-creemos- que esto va muy bien, que estamos siendo parte de la felicidad cósmica y que el amor crece y recorre nuestras venas repletas de sangre intrépida. Luego estamos intentando tararear una canción mientras la luna cuarto creciente se hace llena y me besas la cabeza para dormir en el apogeo de tu hombro y tu olor a axila es muy dulce y me gusta bajar por tu pecho para morder tu tórax,- sentir el latido de tu corazón es viaje-, escuchar como tu respiración hace sincronía con la mía y se convierte en nuestra. Todo esto -ahora parte de la imaginación- hace que me den apacibles instantes de querer dormir y vivir ahí, de que existas, y entre escalofríos y polillas carcomiendo mis entrañas imagino tu corazón que está corrompido por tu volatilidad, tu inexistencia, tu desapego, tu búsqueda de respuesta ante nuestra irrealidad. Tu abstracta figura se lamenta también, tu concepto ya no quiere ser sentir, quiere convertirse en símbolo y significante. Es casi imposible a estas alturas, entendamoslo, hay que esperar aún -esperemos por favor-. quiero tejer un espacio, un camino que me guíe hacia ti, necesito encontrar las pistas y hallar el mapa que lleva hasta tu corazón corrompido…Estarás durmiendo solo?, te carcome en la noche el eco de mi inexistencia y figura abstracta?, ahora sólo puedo enviarte magnetismo telepático, para no morir y tener que nacer de nuevo, pa besarte la frente en cada uno de los siguientes amaneceres que me quedan por despertar.
Estamos en tu pieza jugando a hacerlo- frenéticamente-, prendes y apagas la música, y en largos intervalos tomamos agua, respiramos, tanteamos el polvo y entonces encendemos luz.
-creemos- que esto va muy bien, que estamos siendo parte de la felicidad cósmica y que el amor crece y recorre nuestras venas repletas de sangre intrépida. Luego estamos intentando tararear una canción mientras la luna cuarto creciente se hace llena y me besas la cabeza para dormir en el apogeo de tu hombro y tu olor a axila es muy dulce y me gusta bajar por tu pecho para morder tu tórax,- sentir el latido de tu corazón es viaje-, escuchar como tu respiración hace sincronía con la mía y se convierte en nuestra. Todo esto -ahora parte de la imaginación- hace que me den apacibles instantes de querer dormir y vivir ahí, de que existas, y entre escalofríos y polillas carcomiendo mis entrañas imagino tu corazón que está corrompido por tu volatilidad, tu inexistencia, tu desapego, tu búsqueda de respuesta ante nuestra irrealidad. Tu abstracta figura se lamenta también, tu concepto ya no quiere ser sentir, quiere convertirse en símbolo y significante. Es casi imposible a estas alturas, entendamoslo, hay que esperar aún -esperemos por favor-. quiero tejer un espacio, un camino que me guíe hacia ti, necesito encontrar las pistas y hallar el mapa que lleva hasta tu corazón corrompido…Estarás durmiendo solo?, te carcome en la noche el eco de mi inexistencia y figura abstracta?, ahora sólo puedo enviarte magnetismo telepático, para no morir y tener que nacer de nuevo, pa besarte la frente en cada uno de los siguientes amaneceres que me quedan por despertar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario